Si pudieras reconocer que me amaste de tal forma que cambiaste de religión, te alejaste de los tuyos, sin motivo y sin razón, que tu indiferencia y soberbia estúpida te hizo perder a la mujer que amaste con todo y más que tu corazón.
Si pudieras, salirte de ese mundo de mentiras para evitar reconocer tu pérdida, quizás lograrías advertir todos los obstáculos que tu mismo has creado para mantenerte lejos de tu fracaso, pues sin dudas, es solo tuyo, esa soberbia intelectual que te hace creer que estás por encima de los demás, tu avaricia por contar dinero, tu hacer autómata y calculador, carente de sentido y de razón.
Si pudieras, al menos por un instante dejar de mentirte, de asumir tus fallos, tus fallas, tus errores, tus zonas erróneas..., si al menos por un instante tuvieras el valor de verte a tí mismo abandonando todo este invento cargado de resentimiento, de absurdos, de rencor y fastidio...si pudieras al menos sentir algo distinto al desamor...
...quizás, tal vez...pudieras salirte de esta cárcel que te inventaste, y lograrías disfrutar al menos un poco de tu presente en el cual te mantienes ausente, distante, inerte, acorazado hasta los dientes de mentiras, de insomnios sin salida.
Si pudieras reconocer tus errores, esos que se alojan en el ardor de la boca de tu estómago hambriento, si al menos pudieras alzar la mirada y reconocer tus fallas...quizás así encuentres lo que buscabas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario