Hola Amigos, hace un tiempo que no escribo, es bueno valorar el silencio...nos acerca hacia lo más bello que vive dentro nuestro.
Bueno, que contarles...?!, hoy me animo a escribir sobre la maravillosa virtud de la experiencia que es la única que puede mudar nuestro carácter, hacerlo más exquisito, genuino, real.
Obviamente, me inspira el amor...hermosa experiencia que nos inunda el alma de emociones y sensaciones divinas, lo bueno de dejarse llevar es la posibilidad de transitar el camino del autoconocimiento y asi nos descubrimos a nosotros mismos en el otro ya sea por similitud u oposición y hasta por omisión.Dicha sabiduría excede a la razón pues la sobrepasa, hace que colapse, que pierda su sentido más íntimo.
En estos tiempos aprendí que amar no se trata de conformar ni de conformarse, no se negocia en el amor, no hay rey, no hay señor...simplemente te pertenezco en el tiempo presente, justo allí cuando coincidimos siendo libres de miedos y de anticipaciones.
Aprendí que no hay mayor riqueza que la no exigencia, pues cuanto más libre eres, más alto vuelas...cuanto más libre eres, más placer sientes y ese momento se hace mágico echando por tierra formas...pues cuando te sientes amado y respetado hasta el más suave susurro enamora.
Bueno amigos, la vida es mágicamente maravillosa...y estamos sobrados de magnificencia, es cuestión de disponerse a disfrutar la virtud de la experiencia.
Oí decir que las mujeres tenemos la maravillosa virtud de multiplicar aquello que recibimos...dunamis !.
